Madrid, 1 de diciembre de 2016. MS. – Propietario de Bodegas Finca la Emperatriz, el joven bodeguero Eduardo Hernáiz sustituye a Óscar Tobía, propietario de Bodegas Tobía (Cuzcurrita) y quien ha estado al frente de la riojana Asociación de Bodegas Familiares durante los últimos ocho años.Eduardo hernaiz 0171_2400x1600

Esta organización nació en el año 1991 por iniciativa de una veintena de viticultores y pequeñas bodegas de Rioja para defender los intereses del modelo de negocio familiar, y aseguran que su fundación fue clave para ocupar un espacio ante los grandes operadores del sector riojano. A día de hoy esta agrupación cuenta con cuarenta asociados y abarca todo el ámbito de la Denominación de Origen Rioja. En esta sentido, Eduardo Hernáiz, cuyo mandato durará cuatro años, asegura que “estamos en un momento crucial y de cómo nos vaya a las bodegas familiares dependerá el futuro de la región”, una afirmación que realiza ante los cambios que se están produciendo en el sector en general y en el seno de la DOCa Rioja en particular. “Las bodegas familiares necesitamos alzar la voz y conseguir la complicidad de las instituciones y de los ciudadanos riojanos en un momento crítico en que los cambios legislativos, las directrices comunitarias tendentes a la liberalización del sector y la presión de los grandes grupos bodegueros nacionales e internacionales amenazan la supervivencia del modelo de la pequeña y mediana empresa familiar de Rioja”.

Continuando con este argumento, el nuevo presidente recuerda que la Asociación de Bodegas Familiares se opuso a la libertad de uso y la coexistencia de marcas comerciales en diferentes zonas vitícolas de España y del mundo porque su aprobación, denuncian, se ha traducido en la fuga de inversiones a otras regiones al tiempo que la denominación riojana ha recibido el desembarco de grandes grupos vitivinícolas animados por un interés económico. “Pero somos las pequeñas bodegas familiares las que creamos empleo de calidad e indefinido, las que fijamos población en el medio rural, las que cultivamos viñedo propio y las que tenemos todos los huevos en una única cesta, Rioja, por lo que de cómo nos vaya a nosotros dependerá el futuro de esta región ”, afirma categórico Hernáiz. Por ello reclama un mayor apoyo de las instituciones frente a los grandes grupos, “porque las bodegas familiares tenemos que empezar a mostrar que somos diferentes y que tenemos un compromiso estratégico con la sostenibilidad y con el territorio”.