LA CATA

Aspecto

Rojo cereza muy intenso, seno algo cerrado, delgado borde rubí.

Nariz

Profundo, concentrado, con muchos matices perfectamente ensamblados pero bien diferenciados; base neta de frutas rojas y frutos silvestres maduros, tonos de especias negras (pimienta), balsámicos (monte bajo, nota de piñones), florales (lilas secas) y minerales (grafito), fondos de tinta y trufa negra, toques de hoja de tabaco. Potente.

Boca

Estructurado, con cuerpo y sensaciones de solidez pero sin aristas, taninos firmes bien redondeados por la madurez de la fruta y por la crianza, centro un punto untuoso, acidez muy bien equilibrada, sabroso, muy amplio y complejo en los aromas de boca, con muchos matices que parecen nacer en la base de fruta madura, final de boca largo, amplio y elegante.

Evolución

Tinto grande que ronda los 100 puntos; está en un momento excelente pero alcanzará su madurez hacia 2025 y se mantendrá bien muchos años más.

Servicio

Temperatura: 16ºC. No precisa decantación ni oxigenación, pero mejora sus prestaciones si se deja que abra los aromas en la copa (mejor en copa grande).

Gastronomía

Tiene complejidad y consistencia y al mismo tiempo frescura para maridar bien con platos especiados y potentes, con caza mayor (estofado de corzo) y de pluma (pichón), incluso con texturas gelatinosas, aunque el picante no le favorece. Se puede optar por platos más amables, que permitan disfrutar directamente de los múltiples matices del vino, caso de las carnes rojas de res grande o de los jarretes de vaca. También va bien con las humildes pero gozosas legumbres: cocido madrileño, pochas, caparrones.