Lagasca 64. Madrid

Tel. 913 486 188

No cierra

www.restaurantelaatrevida.com

 

Puerta La AtrevidaAcaba de abrir sus puertas como restaurante del NH de Lagasca y entre sus credenciales cuenta está Óscar Velasco –reconocido chef al frente de Santçeloni–, en La Atrevida uno de los socios propietarios a la vez que director gastronómico. Se trata del segundo proyecto puesto en marcha por La Colección de Gastronomía, sociedad propietaria, en Madrid, después del estreno de MEATing.

Con capacidad para unas 80 personas en la zona de restaurante, a la entrada cuenta con una barra para picotear –expositor de embutidos incluido– y tomar algún vino por copas; de hecho, Ramón Bilbao tiene destacada presencia en ambos espacios pues es uno de sus partners. Es más, en el comedor disponen de un par de zonas que hacen las veces de reservados y una de ellas lleva el nombre de la bodega, siendo la encargada de su decoración.

Una primera parada en la barra propone una carta con tres básicos, e imprescindibles, apunta el equipo: tortilla de patata, que hacen al momento, ensaladilla y croquetas. Pero suman además laterío, tapas varias y chacinas.

Comedor1Dentro, en el comedor, también cocina y espacio invitan a compartir, lo que hace que la media de precio sea bastante ajustada (30-35 € con vino, aseguran). Su discurso culinario se basa en un recetario tradicional que Óscar, junto al jovencísimo Marcos Pérez, chef ejecutivo de La Atrevida, han revisado y actualizado en lo que a técnicas, productos y presentaciones se refiere. Con este planteamiento, producto seleccionado, sencillas elaboraciones y propuestas reconocibles. Coca de hojaldre (finísimo, exquisito) con sardinillas, tomate y pimiento rojo; ensaladilla “La Atrevida”, que venden como rusa pero que en nada se parece pues lleva poca patata, abundante cebolla roja y zanahoria, y nada de atún, es más, llamarla ensaladilla invita a la confusión; un chocante puerro con guacamole, original por la combinación y refrescante; estupendas croquetas de jamón, por elaboración y sabor; una sopa de jarrete de ternera (muy bien desgrasada) con fideos chinos, muy recomendable… Son sólo algunas de las entradas con las que comenzar, puerritos-cocidospara luego pasar a platos principales con destacados reseñables como el de callos, morro y pata; la costilla a baja temperatura con salsa barbacoa, o la merluza al pil pil con sofrito de tomate, donde lo importante a destacar es la calidad y el punto del pescado. Terminan con un repertorio de postres para quien guste de cosa dulce, y entre los que rescato, por fina, la tarta de queso.

En lo que a vinos se refiere, y teniendo en cuenta lo apuntado al comienzo, es breve pero con un poquito de todo, incluidas referencias menos conocidas (de zonas vinícolas menos populares o afamadas) pero cuyos precios invitan a ser probadas. Por supuesto, el servicio y la temperatura están muy cuidados, cosa de agradecer siempre. Ah, e importante saber que puedes llevar tu vino y ellos te cobran 6 euros por el descorche.