Madrid, 27 de marzo de 2018. MS. – El próximo lunes, 9 de abril, profesionales y aficionados del vino podrán disfrutar de una intensa jornada en Madrid. La razón, dos interesantes salones, distintos entre sí y, por ende, complementarios. La Denominación de Origen Somontano celebra la segunda edición de este encuentro con sus vinos que el pasado año resultó de enorme éxito. Por otro lado, la distribuidora catalana Cuvée 3000 –con Joan Valencia a la cabeza– trae a la capital una extensa representación de las bodegas con las que trabaja, de muy distinto perfil y con una amplia e interesante variedad de elaboraciones, desde los más radicales vinos naturales a grandes clásicos franceses.

En lo que se refiere a la denominación oscense, en el Salón de los Vinos DO Somontano serán 21 (de las 32 que la conforman) las bodegas presentes, que además estarán acompañadas de su popular Ruta del Vino, un atractivo y ya muy asentado destino enoturístico anual. Tendrá lugar en los salones Renacimiento del hotel Miguel Ángel by BlueBay (C/ Miguel Ángel 29-31), en horario de mañana y tarde (de 12 a 15 h. y de 17 a 21 h.), y los asistentes podrán conocer y catar, junto a algunos de sus máximos responsables, de los vinos de las siguientes firmas: Osca, Fábregas, Viñas del Vero, Enate, Pirineos, Valdovinos, Blecua, Dalcamp, Otto Bestué, Laus, Sommos, Meler, Alodia, Estada, Obergo, Sers, Monte Odina, Chesa, El Grillo y la Luna, Batán de Salas – De Beroz e Idrias.

Primera edición del Salón de los Vinos del Somontano.

Una completa representación de la zona donde encontraremos las marcas clásicas pero también las últimas novedades y proyectos. Junto a ellos, participa por vez primera la Ruta del Vino Somontano, una propuesta turística en torno al vino que el año pasado recibía más de 77.000 visitantes, entre los que los madrileños son la tercera comunidad más numerosa.

La cita con Cuvée 3000 será en el Museo del Ferrocarril (Paseo de las Delicias, 61. Nave de Fomento), en horario ininterrumpido desde las 12 hasta las 20 horas de la tarde, y la entrada tiene un precio único de 5 euros, en el que se incluye la copa de cristal que se entregará al entrar. Ocho horas para poder disfrutar, en un único espacio, de 46 bodegas de la más diversa procedencia (en la imagen) y con elaboraciones para todos los gustos, incluidas curiosidades como los vinos de Esencia Rural, que reposan en depósitos de arcilla soterrados, o los de Ton Rimbau, que salen al mercado en botellas de procelana. En definitiva, una jornada de lunes para empaparse, una vez más, de lo mucho y variado que se hace o/y oferta en nuestro país en lo que respecta al mundo vinícola.