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Madrid, 29 de julio de 2010. AP. La crisis y el ambiente “depre” que se percibe en el mercado del vino no ha impedido que algunos sigan tomando posiciones y que vayan llegando noticias alentadoras, como la nueva situación de Enate, de la que dábamos cuenta hoy mismo. El despiece del grupo Domecq Bodegas va a dar bastantes novedades en un plazo corto. Mientras, la última venta supone también la llegada de un nuevo gallo al corral: la familia Villar Mir ha adquirido Dehesa del Carrizal.

No ha trascendido el importe de la operación e incluso los nuevos propietarios quieren posponer el comunicado oficial hasta septiembre. Sin embargo, la venta está confirmada, como también el deseo de Juan Antonio Villar Mir de dar continuidad a la línea enológica de la bodega, en la que se mantiene el enólogo de siempre, Miguel Ángel Benito, y la asesoría de Ignacio de Miguel, padre ideológico de la bodega, de los vinos y hasta de la zona, el valle del Bullaque, en los Montes de Toledo, en donde contribuyó de forma decisiva a su formación como zona de vinos de calidad participando en la puesta en marcha de dos proyectos destacados de dos personajes poderosos, Dehesa del Carrizal, de Marcial Gómez Sequeira, que fuera propietario de Sanitas, y Pago de Vallegarcía, de Alfonso Cortina, ex presidente de Repsol.

Dehesa del Carrizal fue fundada en 1988 cuando el médico y empresario Marcial Gómez Sequeira hizo plantar ocho hectáreas de viñedo en El Carrizal, una extensa finca de caza situada en el valle que separa los Montes de Toledo del Parque Nacional de Cabañeros. La finca tiene continuidad con otra, llamada Los Valles, que entró también en la operación (de hecho, fue la primera en ser puesta en venta, pero en la zona no tiene buena fama como finca de caza, al contrario que El Carrizal, y no se pudo vender), de la que está separada solamente por una carretera local, y es vecina de otras grandes haciendas con titulares de apellidos sonoros, como el citado Cortina, Conde (la famosa La Salceda está aquí), Alcocer, Banús y hasta el Patrimonio Nacional (por aquí cerca está el famoso refugio antinuclear de Felipe González).

Dehesa del Carrizal, puesta en marcha a impulso de la labor de proselitismo enológico que realiza Carlos Falcó, marqués de Griñón, con todos sus amigos millonarios, cayó en manos de Ignacio de Miguel, uno de los más famosos y prolíficos enólogos españoles (Estancia Piedra, Casalobos, Capilla del Fraile, Carabal o El Regajal, son algunos de los vinos que firma), que en esos años ochenta estaba a cargo de la bodega del marqués de Griñón y fue el que trajo a la nueva bodega a su colaborador, Miguel Ángel Benito, que es el enólogo titular de la bodega.

A partir del tinto inicial, Dehesa del Carrizal Cabernet Sauvignon ’89, la viña, la bodega, construida en 1999 (los vinos se elaboraron durante diez años en la bodega del marqués de Griñón, al otro lado de los Montes de Toledo) y los vinos fueron creciendo al mismo ritmo que el entusiasmo de su propietario. En la actualidad el viñedo supera las 22 hectáreas y se elaboran seis tipos de vino. Dehesa del Carrizal fue calificada como denominación de origen de pago en 2006; es tal vez la casa que con mayores méritos ha obtenido esa indicación geográfica.

La crisis afectó seriamente a los negocios de Marcial Gómez Sequeira, agrupados en el holding Investblue, en el que había empresas de construcción, tecnología y la propia bodega. El grupo entró en crisis y desde abril de 2009 está en “concurso de acreedores”. Con la venta de las fincas del valle del Bullaque, que suman más de tres mil hectáreas, parece ser que el empresario sanea las economías de Investblue.

La venta la ha realizado a Juan Miguel Villar Mir, empresario madrileño que fuera ministro de Hacienda en el primer Gobierno de la Monarquía. Ha adquirido las fincas a título personal y no se integrarán en el grupo que preside, que tiene empresas punteras en sectores como el químico (Fertiberia), metalúrgico (Ferro Atlántica), construcción (OHL) y energía (GMV). En este último, hoy mismo se ha anunciado la compra por 29 millones de euros de Centrica Energía, filial española de la distribuidora británica de gas y electricidad Centrica.

Juan Miguel Villar Mir coincidió con Marcial Gómez Sequeira como miembro de la junta directiva del Real Madrid, del que llegó a ser vicepresidente en la etapa de Ramón Mendoza. El que fuera ministro en el Gobierno de Carlos Arias Navarro aspiró a la presidencia del club madrileño en las polémicas elecciones de 2006, que fueron ganadas por Ramón Calderón.